lunes, 8 de octubre de 2018

veneno


Enredándose en mi cuerpo;
odio negro me corrompe
de mi vida ahora dueño
que mi sueño siempre rompe.
Punzante dolor en el pecho,
acero chispeante deshecho
el boquete que dejó tu bala,
duele menos la puñalada.
Gritando en la penumbra me encuentro,
despojos derrotados,
espíritu acabado,
sueño desvelado,
calcinado por cenizas grisáceas
y de plomo techo.
Esperanzas bombardeadas
que ahora son mi lecho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario